sábado, 7 de marzo de 2009

Sesion II

En nuestra segunda sesión vimos el tema del argumento. Describir es una tarea difìcil si no se usan adecuadamente las herramientas. El ordenar ideas, resulta complicado sin ellas. Parte del ejercicio fue plantear el argumento para una obra. Se trata simplemente de contar -no todo-, què acciones iremos verìamos en el caso de una obra de teatro. Situamos a los personajes en un:

Espacio escènico: acà se organiza la fábula, se nos muestra una realidad (que es realista, no objeto de realismo), se utilizan metáforas. Vimos también algunos tipos de espacio escénico: de la tragedia clásica, romántico, naturalista, simbolista, expresionista.

Dentro de éste espacio escénico, que es el corazón del teatro, existe una atmósfera (yo la coloco por sobre la escenografía...la integro, la suplanto incluso).

En ésta atmósfera vemos el conjunto de elementos visuales, sonoros, olfativos, gustativos, incluso táctiles que nos transmiten sensaciones (soledad, angustia, alegría).


Tips importantes:

Sin que en la atmósfera planteemos cómo son los personajes, el espectador puede asumir cómo serán mucho antes de salir a escena, dependiendo de la atmósfera que se maneje. Esto no es una regla, pero muchas veces Atmósfera y personaje deben ser coherentes, es decir, debe existir unidad entre ambos. Ejemplo: atmósfera lúgrube= personaje lúgrube (aunque en el exterior veamos otra cosa, seguramente, por dentro, la atmósfera influye en el personaje).

El argumento es la idea sustancial de la accion o acciones del texto dramático. No debe contar todo.

Dosificar la información.


Lo realista es más cruel, irónico. Es más real.
El realismo imita, por lo tanto, deja de ser creíble y se convierte en algo común.


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